miércoles, 19 de septiembre de 2012

Del origen de Ancla

No puedo asegurar mucho, ya que no fui parte del primer Ancla fundado en el Perú. Ancla, como es sabido, representa a Antonio Claret, el gran misionero catalán, que fundó asociaciones religiosas y laicas, entre las que destacan los misioneros y misioneras claretianas, pero también asociaciones laicas. Pero, con motivo del reencuentro del Ancla de El Porvenir, una de las experiencias más intensas entre las que he participado, hay cierto interés en conocer sus orígenes. Por ello, sería bueno saber quién dio la idea original del nombre y del grupo. Primero las realidades, el grupo Ancla es fundado en Magdalena, parroquia Corazón de María. El encargado de dirigir este grupo era un cura recien ordenado, que vino al Perú con otros tres novatos curas españoles, a renovar la pastoral de la delegación claretiana de Perú, muy dedicada exclusivamente a parroquias y colegios, pero, y esto era lo preocupante, sin vocaciones ni personal especialmente joven. Especialmente estos jóvenes sacerdotes habían compartido estudios en Salamanca con un estudiante peruano, una vocación venida desde Arequipa, que era Angel Núñez. Angel, gran amigo de promoción, fue el catalizador para que los compañeros de promoción: Victorio Robles, Pablo Gonzales, Antonio Díaz Bilbao, y un año después Pedro Herrero, decidieran ejercer su ministerio en Perú. Para la congregación era esencial dotar de sangre joven a la delegación de Perú, había sucedido una renovación en la Iglesia con el Vaticano II, en Latino-américa se veían nuevas visiones teológicas más comprometidas con la opción por los pobres. La juventud jugaba un papel fundamental en esta renovación. Pablo fue encargado de la pastoral juvenil en la parroquia Corazón de María de Magdalena. Creo que para captar los jóvenes lo que se hizo es partir de dos grupos iniciales:en primer lugar un club de admiradoras de los Ángeles Negros, que, a pesar de su origen, tenían una mayor formación, en cuanto a lo académico. También fue importante la participación de las misioneras del Verbum Dei, que tenían residencia cerca de la parroquia, y ya habían trabajado con un grupo de chicas en plan vocacional, estas monjitas eran mas bien modernas, no usaban hábito formal, aunque la ropa de cura y monja es casi reconocible de inmediato, y las dirigía la hermana Amelia, una super monja que caminaba a cien por hora en velocidad crucero. El grupo de las chicas del verbum dei se integraron a Ancla, y llevaron a sus hermanas y hermanos, y es precisamente con ese grupo que mi propio hermano se integró al Ancla con amigos del barrio, gracias a que las hermanas de uno de los amigos eran del grupo de chicas del Verbum Dei. Los dos grupos originales fueron femeninos, pero de inmediato convocaron a sus hermanos, y amigos de sus hermanos, así como a sus amigas y amigas de sus amigas, lo que hizo un grupo mixto bastante balanceado. Así que se constituye el grupo ya mixto, bajo la animación de Pablo Gonzales Pascual. Pablo, como les dije, era un claretiano joven, de muy buen aspecto físico (un muy buen jugador de fútbol) y una inteligencia muy superior al promedio, más bien podría decirse que con coeficiente de genio. No se si su idea fuese la que luego devino en las características del Ancla, pero lo que construyó es un grupo de encuentro. Las actividades iniciales giraban en torno a la misa, el fútbol y la reunión. Entonces esta combinación de elementos dio origen al primer Ancla, de Magdalena, grupo de encuentro, que cantaba en misa (evidentemente todo lo religioso lo aportaban las verbum dei), que jugaban fútbol (porque a Pablo le gustaba y a los muchachos también), que celebraban cumpleaños (porque las fans de los ángeles negros trajeron la sana costumbre). A mí me parece que el nombre se le ocurrió al mismo Pablo, como no estuve en el origen, no se si hubo una discusión interna para definir el nombre, pero tiene mucho sentido que, o se le haya ocurrido, y lo propuso, o trajo la idea preconcebida desde España. Como les dije, no estuve en sus inicios, ni siquiera tuve ganas de ingresar antes, porque era un universitario cuya vida giraba en torno al Fundo Pando y la vida política universitaria. No compartía casi nada con el barrio, menos me interesaban los problemas religiosos. Por esto la lista de primeros miembros puede estar algo limitada. Estaban Meche Saenz, Lucy Saenz, Raquel Rivas, Rocío Carrera, Juanita Miñano, Luis Revilla, Rudy Saenz, Hugo Velarde, Pedro Gil, Paco Gil, Sonia Zúñiga, Cristina Bravo de Rueda, Susana Torres, Milagros Torres, Javier Larrañaga, Cintya Carossi, Demetrio Tantalean, Angel Soto y recuerdo otros nombres, pero por el sobrenombre. Una de las chicas me volteó la cara por haberle llamado por el sobrenombre. En fin. Sus primeras actividades, formativas, giraron en torno a reflexionar los contenidos de Jesus Christ Superstar. Estoy hablando de aproximadamente el año 1975. En la foto está Pablo Gonzales, me acabo de dar cuenta que está en Perú, dejó la congregación para dedicarse a la empresa privada con mucho éxito