¿ Los
Afrodescendientes estamos tan contentos como para celebrar el Día de la Cultura
Afroperuana sin ningún tipo de cuestionamiento, ni exigencia, ni posición
firme, ni reivindicaciones?
(Rafo Santa Cruz)
(Rafo Santa Cruz)
Cuando el
gobierno de Toledo crea la CONAPA, a partir de la secretaría de asuntos
indígenas, tiene que incorporar el tema de los afroperuanos ya que estaba
incluido en la agenda de la antigua secretaría, y el proyecto sustento del
Banco Mundial lo consideraba así. Esta nueva institución debía conformar un
directorio con representantes de los pueblos de acuerdo a la costumbre de los
mismos para generar la elección. En esos momentos casi por aclamación surgió el
nombre de Rafael Santacruz como representante, ya que en medio de la dispersión
de los afrodescendientes peruanos, era la personalidad más destacada y
reconocida, era un legítimo representante. Lástima que, como en muchos casos de
organismos creados como entes participativos, el puesto ya estaba destinado por
los linderos políticos.
La
perspectiva de Rafael siempre fue identitaria. En el campo musical, con el que
comienza su trabajo público, y en compañía de su hermano Octavio, toman la
música afroperuana como motivo principal, no porque vivieran en un medio en el
cual tuvieran un acceso inmediato a las tradiciones, sino como un esfuerzo para
retomar aquellas tradiciones que se estaban perdiendo. Se preocupó de
investigar el origen, el devenir y las
formas actuales de cada expresión musical, incorporándolas en su ejecución.
Cada vez que efectuaban una interpretación expresaban el contenido histórico
cultural del mismo, en especial lo hacía Rafael, quien en esos casos realizaba
una actividad docente que luego se replicara en las aulas y auditorios.
¿Qué era la
identidad para un afrodescendiente con un cincuenta por ciento de hispanidad?.
Es la identidad en el lugar de nacimiento, la forma de ser en su país y de su
país en el mundo. Es una combinación de una percepción externa por la cual se
le asigna el carácter de negro y la vivencia cultural de pertenecer a una
familia orgullosa de su composición étnica y su cultura. Es importante su
percepción de cultura “No podemos
hablar de la cultura peruana sin tener en cuenta el importante legado de los
afrodescendientes, más allá del color de la piel... “ , publicado en su página de
facebook. De aquí podemos inferir tres componentes importantes de lo que
entiende por identidad.
1. 1. Es constitutiva de la cultura
peruana
2. 2. Es importante, trascendente,
fundamental
3. 3. Supera la concepción simplista del
color de la piel.
La
identidad afro como constitutiva de la cultura peruana. No se puede afirmar la identidad afroperuana
independiente de ese elemento común que es el ser peruano. No es que se
construya una cultura aparte, un gueto como en Estados Unidos por ejemplo, es
formada en interacción total con los
grupos sociales existentes. Construida en conjunto con aquellos grupos con los
que comparte el pathos de una condición desfavorable. Para Rafael existe
identidad afroperuana conformada en una consciente afirmación de peruanidad.
Está implicada en ella, y no puede separarse de la misma. No se es afroperuano
independiente de ser peruano, pero tampoco se puede ser peruano sin tener por
ello el elemento afroperuano.
Pero esta
constitución de lo peruano no es una incorporación surgida del devenir, no es
un simple aporte de una minoría que también fa fusionándose en la cultura
peruana. Para Rafael este aporte es fundamental, es decir está en las raíces
constitutivas de la peruanidad. Por su trabajo se entiende que lo mire desde la
perspectiva musical. Desprenderse de los elementos afros en la música peruana
es tan difícil como hacerlo de los elementos andinos. Pero es mucho más que
eso, no se queda en la música, sino que la música permite intuir algo que está
en todas las manifestaciones culturales peruanas. El lenguaje, las costumbres
cotidianas, la forma de asumir el trabajo, la productividad, en general, tienen
ese contenido afroperuano indesprendible de las otras raíces fundamentales. Al
mismo tiempo la necesidad de afirmarlo expresa la situación de invisibilidad,
esa situación que minimiza o niega el aporte de los afroperuanos como grupo
humano, como cultura, como constructores de la cultura. Por ello la necesidad
de resaltar los aportes, es así que por el lado artístico fundara Perú Afro
como grupo de música tradicional afroperuana, y sea parte de la fundación de la
organización Cimarrones, con la finalidad de expresar una propuesta social de
identidad afroperuana. Fue, con ellos, parte del equipo que elaborara el Quinto
Suyo[1],
propuesta en la que reconociendo la conformación social peruana por cuatro
grupos geográficos que son los cuatro suyos desde el incanato, integraran un
quinto suyo venido desde África, pero establecido totalmente en Perú.
Esta
identidad afroperuana está por encima de las consideraciones melanímicas,
precisamente porque al ser inseparable de lo peruano no puede distinguirse como
tal de forma exclusiva sino como tradiciones que se van dando en el devenir de
la vida conjunta de la población. Lo tenía muy presente pues difícilmente
hubiese existido Rafael si la identidad correspondiese a un grupo cerrado.
Producto de una actividad universal de su padre, torero con actividad en España
donde conoce a su esposa y madre de Rafael, muy niño vive en España su primera
infancia y vuelve en la pubertad a un barrio popular como Breña. En él está
integrado al barrio, así como está nutriéndose de la cultura afroperuana en la
relación con su familia Santa Cruz y la de otra importante familia
afrodescendiente como son los Vásquez. La cultura es transmisión cultural, no
de melanina o color de piel.
En medio de
todo esto su perspectiva estaba en la necesidad de visibilizar la cultura afro,
de resaltar sus aportes, de difundir su historia. Bajo esta perspectiva
realizaba su labor docente y dicente, su trabajo artístico y comunicacional,
sus actividades en grandes o pequeños eventos. Un trabajo diario y constante
que dejó muchos discípulos que lo van replicando.
Cvr. Ago
2014-08-25
[1][1]
El Quinto Suyo es un
documental, obra póstuma bajo la dirección de Fernando Espinoza, quien también
era miembro de Cimarrones con Rafael Santa Cruz.